Sobre nosotros
Fincas Vaguada
Atención directa, compromiso real y una sola persona al frente
En Fincas Vaguada no somos una gran empresa con decenas de empleados ni una franquicia con gestores que cambian cada año. Somos una administración personal, cercana y estable, donde el propietario del negocio es quien te atiende, te representa y gestiona tu comunidad de principio a fin.
¿Por qué nace Fincas Vaguada?
Después de años trabajando en el sector de la propiedad horizontal, seguros y servicios comunitarios, decidí crear un modelo de gestión más directo, más económico y mucho más humano.
Fincas Vaguada nace para dar servicio a comunidades que quieren dejar de sentirse un número más. Aquí no hay traspasos de llamadas, ni comerciales que prometen lo que luego no se cumple. Aquí solo hay un responsable, y ese soy yo.
Nuestro núcleo: el Barrio del Pilar
Aunque trabajamos en toda la Comunidad de Madrid, gran parte de nuestras comunidades se concentran en el Barrio del Pilar, donde conocemos de cerca las necesidades habituales de las fincas: desde los edificios más veteranos hasta promociones más nuevas con equipamientos comunitarios modernos.
Esta cercanía geográfica también nos permite ofrecer una respuesta más rápida, visitas regulares y un conocimiento real del entorno.
Nuestra forma de trabajar
Un único gestor:
Yo mismo. Sin intermediarios ni cambios de persona cada seis meses.
Transparencia real:
Cuentas claras, presupuestos explicados, decisiones consensuadas.
Servicio completo:
Administración, seguros, limpieza, conserjes y asesoría legal.
Disponibilidad 24/7
Para Urgencias reales, porque sabemos que hay imprevistos que no pueden esperar.
Ahorro económico
Al no depender de estructura de personal o comisiones externas.
30% de descuento
Al contratar administración + limpieza + seguro. Atención rápida, sin esperas, sin burocracia
Queremos comunidades tranquilas, estables y bien gestionadas
Gestionamos comunidades de todo tipo: grandes, pequeñas, con pocos vecinos o con muchas instalaciones comunes.
Lo importante no es el tamaño: es la confianza. Y esa solo se construye con implicación real.
